670 - El cántico de la Roca. Dt 32:4

Descansando en Dios - Ein Podcast von Francisco Atencio

670 – Dt 32:4 El cántico de la Roca. El es la Roca, cuya obra es perfecta, Porque todos sus caminos son rectitud; Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en Él; Es justo y recto. Moisés no sólo era un gran profeta, sino que además era un director del canto. Después de tres sermones, transformó su mensaje en canto. Esta canción es una breve historia de Israel. Les recordaba los errores, los prevenía de volver a caer en ellos y les ofrecía la esperanza que sólo se puede encontrar al confiar en Dios. Moisés compara su enseñanza con los beneficios que la lluvia y el rocío producen sobre la tierra. “Goteará como la lluvia mi enseñanza; destilará como el rocío mi razonamiento; como la llovizna sobre la grama, y como las gotas sobre la hierba” (Dt 32:2). Debería penetrar en el corazón duro de Israel así y en nosotros como la lluvia y el rocío penetran en el suelo duro, y produce hierba provechosa. (He 6:7-8). 1. El dador de la vida. “de la Roca que te creó te olvidaste; te has olvidado de Dios tu creador.” (Dt 32:18). En el cristianismo se trata de nacer de Dios: “Todo aquel que cree que Jesús es el Cristo, es nacido de Dios; y todo aquel que ama al que engendró, ama también al que ha sido engendrado por Él.” (1Jn 5:1). Jesucristo enseña: “De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.” (Jn 3:5). Si hemos nacido de nuevo no debemos olvidar al dador de la vida “Y Él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados” (Ef 2:1). “Por tanto, amados míos, como siempre habéis obedecido, no como en mi presencia solamente, sino mucho más ahora en mi ausencia, ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor” (Fil 2:12). 2. El Salvador de los hombres. “La Roca de su salvación” (Dt 32:15). El Nombre de Cristo, sus obras, muerte, resurrección, todo ello le proclaman Salvador, y ello con exclusión de todo y todos los demás “Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.” (Hch 4:12). No menosprecies la Roca inconmovible porque aquellos que edifican sin esta Roca quedarán confundidos (Lc 6:48-49). Su roca es solo las arenas movedizas de sus imaginaciones. 3. La fuente de suministro. “Le dio a gustar miel de la peña, y aceite del duro pedernal” (Dt 32:13). La miel y el aceite hablan de dulzura, refrigerio, fortaleza, y unción, la gracia de Cristo y el poder del Espíritu Santo, “y todos bebieron la misma bebida espiritual; porque bebían de la roca espiritual que los seguía, y la roca era Cristo.” (1Co 10:4). “Sacaréis con gozo aguas de las fuentes de la salvación.” (Is 12:3). 4. El obrero perfecto. “El es la Roca, cuya obra es perfecta, Porque todos sus caminos son rectitud; Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en Él; Es justo y recto.” (Dt 32:4). La sabiduría del creyente, su justicia, santificación y redención comenzadas en Cristo son perfeccionadas en Él (Col 2:10; Ecl 3:4). “El que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo;” (Fil 1:6). 5. La heredad de Dios. “Porque la porción de Jehová es su pueblo” (Dt 32:9). La Roca fue golpeada con vara para dar aguas en abundancia, satisfacer, y heredar un pueblo (Ex 17:5-7). La roca que los seguía era Cristo (1Co 10:4), “quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.” (Tito 2:14). “Vosotros, pues, sois el cuerpo de Cristo, y miembros cada uno en particular.” (1Co 12:27). “Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios” (Ef 2:19). 6. El buen pastor. “Le halló en tierra de desierto, y en yermo de horrible soledad; lo trajo alrededor, lo instruyó, lo guardó como a la niña de su ojo.” (Dt 32:10). Los israelitas no tenían excusa para abandonar a Dios. Él los había protegido como un pastor bondadoso. Los había guardado como una persona protege